La firma, que adeuda las cuatro últimas nóminas, prevé aplicar un ERTE. R. L. M. Los trabajadores aragoneses de la empresa Brassica, adjudicataria del servicio de comedor de cuatro cuarteles de la comunidad, denunciaron ayer el impago de las últimas cuatro nóminas. Los cerca de 40 empleados del cátering de Castillejos (Zaragoza), Sancho Ramírez (Huesca), La Victoria y San Bernardo (ambos en Jaca) criticaron asimismo que la firma andaluza les comunicó "hace solo unos días" la finalización del contrato con el Ministerio de Defensa y que hoy ya no tenían que acudir a sus puestos de trabajo. De hecho, ayer mismo se les exigió en los acuartelamientos la devolución de las tarjetas de acceso.
"Hace unos diez días nos dijeron que iban a dejar de prestar el servicio y que otra empresa cogería el relevo y se haría cargo de la plantilla, pero el día de la huelga nos comentaron que ninguna firma iba a servir el cátering y que no hacía falta que volviéramos mañana (por hoy)", criticaron fuentes de la representación sindical.
Fuentes de Brassica reconocieron el retraso en los pagos e indicaron que su "intención inicial" era abonar tres de las nóminas adeudadas "a finales de este año". Asimismo, explicaron que Defensa había "modificado a la baja" el presupuesto fijado en el contrato y que esa era una de las causas del impago, más allá de las "tensiones de tesorería" de la empresa, "muy dependiente" del sector público y de los impagos que acumula la administración.
Desde la compañía señalaron que en los próximos días se procederá a la "suspensión de los contratos" de los trabajadores. "Nuestra intención es aplicarles un ERTE hasta que Defensa saque el nuevo concurso en enero y se puedan subrogar a la nueva adjudicataria", explicaron.
Sea como sea, los representantes sindicales denunciaron la "falta de información" por parte de Brassica y subrayaron que van a exigir el pago de las nóminas. La gran mayoría de la plantilla está compuesta por mujeres, con una media de edad de 50 años y una antigüedad de más de diez.
Debido a la eliminación del servicio de cátering, los militares de Castillejos que quieran comer de menú deberán trasladarse al acuartelamiento Capitán Mayoral (se fletarán buses). En Jaca, serán los propios militares los que se encarguen de cocinar.
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